#3 Perversión en las relaciones de propiedad

-y anhelo en cualquier CUCÚERPO menos el tuyo-

IMAGEN DEL MONTE ABANTOS + COLLAGE DE AUTORÍA DESCONOCIDA

| TIEMPO INÚTIL ESTIMADO 5´ |

Quizá no todos los

cucúerpos

estén disponibles para la historia como todas las flores no lo están para ciertos

cucúerpos

deberían generar lenguaje para incapacitarnos. Un

cucúerpo

como habitáculo emocional como lo es una zarza. Una barba de chivo. Un vaso de leche. Mi

cucúerpo

nunca será libre porque está supeditado por las emociones advirtiendo la libertad como un deseo recreado, esperanzador y esquizoide en mi presente.

 

¿La libertad es un producto?

 

Una de las perversiones en el ser humano puede consistir en las relaciones de propiedad que imponemos inconscientemente. Estábamos en la piscina municipal del pueblo. Dijiste que había algo de ridículo en la escena. A partir de tu sensación me puse a observar las siluetas semidesnudas que se cruzaban ante mí.  Había

Cucúerpos

erguidos en dirección al cielo como una continuación del límite. Apartaban el agua en ondas expansivas constatando una presencia autoritaria.

Cucúerpos

adueñándose de algo -sin corresponder-. También los había encogidos en dirección a la tierra como una continuación del límite marcado por el propio

Cucúerpo

amenazado.

Cucúerpos

ineficaces.

Cucúerpos

apurados al margen de la inconsistencia.

 

BROOKE DIDONATO

Anhelar cualquier historia pasada, recrearme en la angustia porque no puedo volver. Que se entrecorte un idioma que espera y no reconozco. Ceder a cualquier acto elemental, cotidiano -solitario-, se convierta en grotesco y me haga sentir culpable por

serhumanoquenoproducenosemuevenoconsiguehablarpensarsentircorresponderalabelleza.

 

Visibilizo la presencia normalizando arquetipos, asumo las carencias como lógicas inherentes al acto de vivir. Personalmente, el hecho de estar viva y todas sus acciones que la complementan me comprometen emocionalmente a formar parte de algo. Sin quererlo.

« ¿Sueñas alguna vez pobre arruinado burlado y perdido con pequeños y terribles agujeros por encima de todo, qué significan esos sueños? »

¿ Y qué sucedería si borramos lo primero y lo último del inconsciente?

Cucúerpos

ofrecidos a una celebración común anterior a todo esto. Seríamos en función de lo(s) demás imposibilitando un contexto basado en la apariencia y la polarización.

Si reaparezco en la escena de la piscina y no pudiera ver esos

cucúerpos

como materia consistente que construyen mi juicio a través de la imagen, quizá me vincule hacia la idea más exacta, a la memoria, al trauma -que no fue pero necesitaba de un modo muy tremendo en algún momento vital-

              EL CANTO DEL CUCO ENTRA POR LA CORONILLA DILATÁNDOSE HASTA LOS PIES

 

tirando hacia abajo, volviendo al subsuelo e incontrolablemente curvando mi tronco hasta enterrar la cabeza como un huevo de tortuga.

Quizá todo persista en la flotabilidad de lo posible y estos

cucúerpos

migren a África y al sudeste asiático. Estado de conservación: preocupación menor.

 

-¿Dónde está tu pájaro, plumita?

-Mi pájaro es un sueño

de lo extraño -por desconocimiento y la emoción de descubrirlo-. Deleuze dijo que cualquier conexión se hace posible. Sea el cuco que aprende la pérdida de cada plumita, que todo

cucúerpo

que anhelo menos el mío cante a aquellos infinitos hallazgos.

AUTORÍA DESCONOCIDA

ME HAN ACOMPAÑADO

→ La lectura de Anne Carson con La belleza del marido | Segundo libro del Club inusual de lectura poética Una cabeza llena de pájaros (Más info en la la web).

→ El desierto rojo de Antonioni.

→ Las piscinas abandonadas en invierno.

→ La canción de Silvia Pérez Cruz, Plumita.

Aquí viene el cuco, de Francisco de Goya (1799)

→ La monja mejicana María de S. José (S.XVII). Se dice que sufrió una crisis de agotamiento por escribir. En una de sus escrituras hace alarde de la `grandísima repugnancia´ cada vez que debía reescribir a causa de traspapelarse. | Información adquirida del podcast Las hijas de Felipe.